A medida que las tensiones en la península de Corea continúan aumentando, Estados Unidos y Corea del Sur han completado un ejercicio militar conjunto en la región de Guam. El ejercicio, conocido como «Silent Shark», se centra en la guerra antisubmarina y tiene como objetivo mejorar la interoperabilidad marítima entre los dos aliados. Esta muestra de fuerza de Estados Unidos y Corea del Sur tiene lugar en un momento en el que Corea del Norte ha intensificado sus amenazas nucleares, aumentando la preocupación en la región y en el resto del mundo.
Un ejercicio bienal para fortalecer la preparación y disuadir la agresión enemiga
El ejercicio «Silent Shark» es un evento bienal que se lleva realizando desde 2007. Durante el ejercicio de este año, participaron el submarino USS Topeka de Estados Unidos, el submarino ROKS Jung Ji de Corea del Sur, aviones de reconocimiento y patrulla marítima. El objetivo principal del ejercicio es mejorar la preparación y la interoperabilidad de ambas naciones en la guerra antisubmarina, lo que fortalece a ambos aliados y promueve la seguridad en la región.
Las maniobras se centraron en la detección y abordaje de amenazas submarinas en la región. Durante el simulacro, el submarino Jung Ji realizó varias visitas al puerto de Guam, mientras se llevaban a cabo las operaciones de reconocimiento y patrulla por parte de las aeronaves. Estas actividades conjuntas permiten a los submarinos de Estados Unidos y Corea del Sur practicar tácticas y procedimientos de guerra submarina en un escenario realista.
Citando a los oficiales al mando
El Capitán de Navío de Estados Unidos, Thomas Williams, comandante del submarino USS Topeka, hizo hincapié en la importancia de estos ejercicios para mantener la preparación y disuadir la agresión enemiga.
«El ejercicio ‘Silent Shark’ es fundamental para fortalecer la interoperabilidad de nuestros submarinos y mejorar nuestra capacidad para enfrentar amenazas submarinas en la región», afirmó Williams.
Por su parte, el Capitán de Fragata de Corea del Sur, Park Jin-hwan, comandante del submarino ROKS Jung Ji, destacó la importancia de la cooperación entre Estados Unidos y Corea del Sur en estos ejercicios conjuntos.
«La participación en el ejercicio ‘Silent Shark’ nos permite mejorar la capacidad de combate de nuestras tripulaciones y fortalecer la estrecha alianza entre nuestros dos países», expresó Park.
Contexto político y amenazas nucleares
La realización de este ejercicio militar conjunto entre Estados Unidos y Corea del Sur tiene lugar en un momento en el que las tensiones con Corea del Norte están en aumento. En los últimos meses, el país vecino ha llevado a cabo una serie de pruebas de misiles balísticos y ha expresado su intención de fortalecer su arsenal nuclear. Estas acciones han generado inquietud en la comunidad internacional y han llevado a un mayor compromiso por parte de Estados Unidos y Corea del Sur para hacer frente a las amenazas del Norte.
Un compromiso más estrecho entre Washington y Seúl
En respuesta a las crecientes amenazas nucleares de Corea del Norte, Estados Unidos ha fortalecido su compromiso con Corea del Sur. El presidente estadounidense ha reiterado el compromiso de su país de defender a su aliado en caso de agresión. Además, se ha llevado a cabo un aumento de la cooperación militar, incluyendo la realización de ejercicios conjuntos como «Silent Shark». Estos esfuerzos buscan enviar un mensaje claro a Corea del Norte de que sus acciones no serán toleradas.
El ejercicio militar conjunto «Silent Shark» entre Estados Unidos y Corea del Sur ha demostrado su importancia en medio de las crecientes tensiones en la región de la península de Corea. A través de estas maniobras, ambos aliados han mejorado su interoperabilidad marítima y su capacidad para enfrentar amenazas submarinas. A medida que Corea del Norte continúa aumentando sus amenazas nucleares, la realización de ejercicios conjuntos como «Silent Shark» se vuelve cada vez más relevante para mantener la seguridad en la región y disuadir la agresión enemiga.
