Tanques Chieftain y Challenger 2 se encuentran en instalaciones secretas del ejército británico
En un sorprendente descubrimiento, se ha revelado que el ejército británico tiene almacenados cientos de tanques de la Guerra Fría en instalaciones secretas. Según Defence24, aproximadamente 900 tanques Chieftain, reliquias de la época de mayor tensión durante la Cortina de Hierro en Europa, están en desuso. Además, se reporta que hay alrededor de 180 tanques Challenger 2 que no están siendo utilizados y no se espera que se actualicen al modelo Challenger 3.
La situación de los inventarios de tanques en Europa y en los países miembros de la OTAN no es satisfactoria, a excepción de dos casos, según Defence24. Este descubrimiento se produce en medio de preocupaciones sobre la disminución de suministros de armamento en Ucrania y las limitaciones de capacidad de fabricación de municiones en Europa.
La flota de tanques británicos ha experimentado una serie de cambios a lo largo de los años. Después de la Guerra Fría, el ejército retiró todos sus tanques Chieftain en 1995 y gradualmente eliminó sus tanques Challenger 1 en 2001. Para reemplazarlos, se introdujo el modelo Challenger 2, del cual se estima que el ejército británico debería tener alrededor de 328 en la actualidad. Sin embargo, la flota del Challenger 2 ha sufrido pérdidas a lo largo del tiempo.
El informe de Defence24 también destaca la falta de capacidades de producción de tanques en Gran Bretaña y menciona la posibilidad de reactivar operaciones en fábricas desactivadas para aumentar la producción militar. Esta medida, sin embargo, plantea desafíos logísticos y políticos en el Reino Unido.
«La situación de los inventarios de tanques en Europa y en los países miembros de la OTAN no es satisfactoria. Hay una necesidad urgente de reevaluar nuestras capacidades y recursos militares», dijo un experto en defensa británico. «El almacenamiento de cientos de tanques sin utilizar es una señal preocupante en medio de una creciente inestabilidad global».
A medida que continúa el debate sobre el futuro de los tanques británicos en almacenamiento y la capacidad de producción de armamento en Europa, expertos y políticos están llamando a una respuesta estratégica y a medidas concretas para abordar estas preocupaciones urgentes.
